El despertar de Aliye trae alegría a toda la gente de la isla. Haziran, que nunca antes había visto a Poyraz tan feliz, teme que Aliye recuerde lo que le dijo cuando todavía estaba en coma. Por supuesto, habrá interrupciones cuando el hotel dé la bienvenida a sus primeros clientes. Pero llega un cliente y acosa a todo el equipo. Eventualmente, es desplazado. El verdadero problema comienza después de que sale del hotel. Las reservas están canceladas. Las agencias declaran que no trabajarán con un establecimiento con esa actitud. Haziran y Poyraz tienen que encontrar una manera de superar este desastre. Mientras tanto, Poyraz está decidido a abrirse sobre sus sentimientos a Haziran.